TARTA SELVA NEGRA

Tarta Selva Negra. LA TARTA. 
Después de años pensando en una deliciosa, jugosa, fresca, sabrosa...en definitiva, perfecta tarta, de las que vuelven a hacerte creer en las bondades de los dulces, un día fuí visitado por las musas y por fín apareció en mi vida un rayo de luz. 
La tarta Selva Negra. 
Chocolate, nata, frutos rojos...más chocolate...más nata...Es nada más y nada menos que la tarta perfecta. Al menos para mí. Así que espero que se quede en mi recetario personal para acompañarnos en todas las ocasiones especiales. En cualquier ocasión. Siempre serán especiales si nos acompaña esta maravilla.

Ingredientes:
Bizcocho:
200 grs. de harina.
150 grs. de azúcar.
150 grs. de mantequilla.
6 Huevos.
200 grs. de chocolate de cobertura.
Un sobre de levadura.

Relleno:  Un frasco de mermelada de frambuesa. 500 ml. de nata 35% m.g. 75 grs. de azúcar.

Cobertura: 100 grs. de chocolate de cobertura. 500ml. de nata 35% m.g. 50 grs. de mantequilla. Frambuesas, arándanos, para decorar. Preparación: Comenzamos preparando el bizcocho. Derretimos el chocolate junto con la mantequilla al baño maría y reservamos. Separamos las yemas de las claras de los huevos. Incorporamos las yemas a la mezcla de chocolate, ya templada, y mezclamos. Añadimos el azúcar, seguimos mezclando, y a continuación la harina tamizada. Terminamos montando las claras a punto de nieve, y las incorporamos a la mezcla moviendo desde el fondo y hacia arriba, suavemente. Untamos un molde con mantequilla, espolvoreamos con harina y vertemos el él la mezcla. Precalentamos el horno a 180º y horneamos el bizcocho 50 minutos. Sacamos y dejamos enfriar. Montamos la nata para el relleno, con el azúcar. Siempre que montemos nata, el cuenco y las varillas, debemos mantenerlos en el congelador, deben estar lo más fríos posible.
Cuando el bizcocho esté frío, lo colocamos sobre un plato dándole la vuelta, dejando que quede la parte de arriba como base. Lo cortamos en tres capas, separando cada una de ellas con cuidado. Untamos la primera capa con la mitad de la mermelada de frambuesa y sobre ella, la mitad de la nata montada. Ponemos la siguiente capa de bizcocho y ponemos la mermelada u la nata restantes, reservando un poco para rellenar los huecos que quedan siempre en el perímetro, y para decorar al final.
Cobertura: Derretimos el chocolate con la mantequilla al baño maría e incorporamos la nata. Mezclamos bien, dejando que empiece a hervir y retiramos del fuego.
Vertemos la mezcla sobre la tarta, dejando que caiga por los laterales y estirándolo con una espátula.
Decoramos con un poco de nata montada al gusto y con una frambuesas y/o arándanos frescos.
Dejamos enfriar en el frigorífico hasta el día siguiente, y ¡¡a disfrutar como enanos!!