Es este uno de tantos platos que nos transportan a la infancia, etapa en la que por alguna razón hay momentos en los que se nos hace necesario camuflar la apariencia de ciertos alimentos y dotarlos de una apariencia si no más vistosa, al menos más agradable y/o estandar para la vista y los paladares de los más exigentes de la casa. Los más pequeños.
Y qué duda cabe que gracias a su contraste de texturas y una vez en el plato, conquistará a todo comensal por igual.
Así que aunque suene raro, ¡vamos a disfrutar de la coliflor!
Ingredientes:
Una coliflor.
Harina.
2 huevos.
Sal.
Pimienta negra.
Para acompañar:
Mayonesa.
Mostaza a la Antigua.
Ceboliino para decorar.
Preparación:
Cortamos la coliflor y la cocemos en agua con sal, hasta que quede al dente.
Colamos y reservamos.
Rebozamos las porciones pasándolas por harina y huevo batido salpimentado al gusto.
Servimos caliente acompañado de una mayonesa aderezada con mostaza a la Antigua y unas ramitas de cebollino.
Más sencillo, imposible.
Que buena.
ResponderEliminarMe encanta la coliflor.
Yo desde siempre la he comido debe ser que como soy rarita jjjjjjj
Un saludito
que rica está y con esa salsita que la has acompañada, tiene que estar rica rica
ResponderEliminarbesosss